Soy Luján Arcidiácono, me dicen “Lu”, “Luji”, “Juja”, “polaca” y de muchas otras formas. Los mil sobrenombres seguramente son un indicio de mi multifacética forma de ser.
Me cuesta definirme porque soy muchas cosas. Tal vez hoy empiezo por definirme como doula porque mi propio camino en la maternidad me abrió a este mundo maravilloso de acompañar mujeres en sus caminos hacia sus maternidades.
Soy mamá de Felipe y de Catalina quienes abrieron una nueva dimensión en mi vida y llegaron para romper todas mis capricornianas estructuras y darme vuelta por completo. También soy mamá de otro ser que no llegó a encarnar pero que con su ausencia - presencia me enseñó muchísimo.
Soy politóloga, feminista, estudiante en pausa de violín y viajera de alma, cada rincón del mundo es un lugar que me invita a ir.
Soy también muchas otras cosas pero, aunque todo aquello que hice sigue siendo parte de mí, sin dudas, la experiencia de la maternidad me permitió conectar con la sabiduría de mi cuerpo, con el poder de lo femenino y con la unión entre mujeres.
Hice la formación de doula de la mano de un proceso personal de apertura a nuevos saberes. Estudié mucho, muchísimo. Y combiné el saber de la ciencia más actual y basada en la evidencia junto técnicas corporales y con rituales ancestrales, enriqueciendo mi forma de acompañar los procesos sexuales y reproductivos de cada mujer que acompaño.
En el 2022 fundé la Campaña Nacional contra la Violencia Ginecobstétrica, un camino de activismo que unió mi profesión con mi vocación y en donde deposito las esperanzas de un cambio profundo en la forma en la que parimos.
Agradezco a cada una de las decenas y decenas de mujeres que he acompañado, por su confianza y por enseñarme, siempre.